Turismo rural: una alterativa de crecimiento

|Argentina|

En tiempos de aislamiento, viajar o hacerse una escapada para descansar se volvió una necesidad. A los lugares típicos, hoy se le suman las opciones cada vez más consolidadas y diversas que ofrecer el turismo rural a lo largo de todo el país.

La gran oferta de paisajes y la diversidad productiva que se ofrecen a lo largo y ancho de todo el territorio argentino, permiten el desarrollo del turismo rural con actividades completamente diferentes unas de otras. El sur argentino, con sus lagos cristalinos rodeados de montañas han sido el perfecto escenario para un turismo vitivinícola cada vez más afianzado. Las "rutas del vino" en nuestro país son un ejemplo pionero para la industria del turismo agropecuario que crece a pasos importantes de mano de los emprendedores rurales.

Sin embargo, en plena provincia de Buenos Aires, en Chascomús,  se puede visitar, por ejemplo a la Estancia La Horqueta, un destino bien campestre que viene en crecimiento en los últimos años. La Horqueta es una estancia con 27 años de historia: "Cuando arrancamos este proyecto era algo nuevo. Empezó a estar en boga el turismo rural y se dio la casualidad de que era algo que a mi marido le gustaba mucho. Él viajó a Europa y ahí vio que este tipo de turismo ya estaba instalado. Había lugares que eran muy caros de mantener y se conservaron gracias a esta actividad. Pensamos que el turismo rural era la opción que teníamos para mantener nuestra estancia. Así decidimos ofrecerle un espacio hermoso a los turistas y al mismo tiempo disfrutarlo nosotros porque es nuestra casa”, explicó Patricia Sanchez Pierri, administradora y dueña de La Horqueta a InterNos.

Foto: Laguna Vitel.

Los dueños de la estancia realizan en el lugar cría de ganado y llevan adelante una huerta familiar. Pero además ofrecen en sus casonas servicios de hospedaje, organizan recorridos en botes en la laguna Vitel –anterior a la de Chascomus-, avistaje de aves y cabalgatas. En tiempos "normales" la familia ofrece para sus visitantes almuerzos o cenas con comidas típicas argentinas, pero con la aparición de la pandemia, de momento únicamente se ofrece el alquiler de las dos viviendas que integran el casco de la estancia.  “Hace diez meses atrás trabajábamos muy bien porque estamos muy bien posicionados. Ahora tuvimos que reinventarnos por el contexto. La Horqueta tiene paisajes hermosos. Lo más  importante es que es un lugar de mucha raíz, de mucha familia y nos ocupamos personalmente de cuidarlo mucho. No es un hotel cinco estrellas pero nos encargamos de imprimirle mucha calidez a la atención que damos”, comentó la administradora.

Foto: Chalet principal de La Horqueta.

"No debería pensarse siempre al turismo rural como algo chiquito o humilde, sino que deberíamos poder pensar en crecer" Patricia Sánchez Pierri

Al ser consultada por el estado de situación del turismo rural hoy en Argentina, Patricia sostiene que la actividad debería ser entendida como una gran posibilidad de crecimiento a nivel nacional. La diversidad de culturas, las actividades productivas y los recursos  naturales para ella son elementos claves. “El turismo rural no tiene ayudas ni créditos blandos, es todo bastante a pulmón. Además veo que hay mucha diferencia por provincias, no veo un turismo verdaderamente federal. A nivel nacional creo que el turismo rural está creciendo, pero si realmente se armara toda una estructura la actividad podría despegar y desarrollarse. No debería pensarse siempre al turismo rural como algo chiquito o humilde, sino que deberíamos poder pensar en crecer", manifestó Sánchez Pierri.

Si de Buenos Aires viajamos a la tierra colorada de Misiones, las consideraciones sobre turismo rural no son muy diferentes e incluso se refuerzan. La provincia del NEA en los últimos años tuvo un gran crecimiento en la industria. Según los últimos datos de INTA Misiones, en el año 2020 se registraron un total de 86 emprendimientos dedicados al turismo rural en toda la provincia que se encuentran distribuidos en varios municipios. Su principal característica es que el área rural misionera se compone de pequeñas chacras productivas, lo que impulsó a que muchas familias se volcaran al turismo como una actividad extra a sus labores diarias.

Senderos de Pindó, en el municipio de Campo Ramón, es una de las iniciativas de agroturismo más renombradas de Misiones. El grupo nació en el marco del programa Cambio Rural de INTA, lleva nueve años en funcionamiento y hoy nuclea a un total de 16 emprendimientos familiares que se dedican al turismo. La oferta del grupo es muy amplia y va desde alojamientos, campings, visitas a arroyos o ríos en las cuencas hídricas del municipio, saltos, cascadas,  plantaciones de yerba mate, bodegas de vinos, paseos en kayaks y hasta una feria artesanal administrada por productoras de la zona.

Foto: Salto Teodoro cuenca (Campo Ramón).

Los lugares que ofrece Senderos de Pindó a los turistas son realmente una postal. La riqueza natural de sus selvas, su tierra, los recursos hídricos y la diversidad cultural constituyen una combinación única para quienes visitan Campo Ramón. “Cada familia administra y trabaja su emprendimiento de turismo junto a las actividades productivas que desarrollan a diario –yerba, té, mandioca, cría de ganado, etc-. Desde cualquier chacra se ve la selva, entonces el atractivo natural es realmente importante. Además tenemos muchos inmigrantes, lo que hace que haya emprendimientos administrados por alemanes, polacos o franceses. Eso le da una riqueza única”, explicó Lorena Osuna, técnica en Turismo de Senderos de Pindó.

Con la pandemia el agroturismo en Misiones tuvo su pico de demanda. Según Osuna, durante  muchos años las personas no entendieron de qué se trataba la actividad pero el año pasado el crecimiento fue abismal. Los emprendimientos de Campo Ramón recibieron 8.600 visitas solo en las semanas de las fiestas mientras que Parque Nacional Iguazú, el principal destino turístico de la provincia, recibió 8.200 personas en todo el mes de enero. Estas estadísticas son las que incentivan a Lorena a asegurar que, con todos los vientos en contra, los pequeños emprendimientos tuvieron un crecimiento histórico.

Además de trabajar en Senderos de Pindó, Osuna integra la Red de Agroturismo UNEFAM. Está integrada por emprendimientos de turismo rural que administran los padres de los alumnos que  forman parte de las Escuelas Agrícolas de Misiones. Este proyecto nació en 2006, dejó de funcionar unos años y en el 2020 volvió a reanudarse a partir de un acuerdo con el Ministerio de Turismo. Surgió con el fin de recuperar e institucionalizar el agroturismo en la provincia. Si bien todavía está en planificación, la red pretende comenzar a funcionar este 2021 y acompañar a los pequeños productores en el desarrollo turístico de sus chacras.

Foto: Chacra Filippin vino artesanal (Senderos de Pindó).

Según la licenciada de INTA, el acompañamiento a la actividad turística por parte del Estado es fundamental. Coincide con Sánchez Pierri en la necesidad de que se construyan políticas públicas para incentivar al turismo rural y sobre todo a los pequeños emprendimientos. “El turismo nacional e internacional en Misiones se concentra en Iguazú y este no genera un derrame en toda la provincia. Nosotros necesitamos a futuro un desarrollo focalizado en el agroturismo  de los municipios, solo de esa manera es posible que el turismo del interior de la provincia crezca”, concluyó Lorena Osuna para este medio.

Con poca difusión, pero con mucho trabajo la ruralidad de nuestro país apuesta al turismo como una manera de crecer económicamente y de mostrar que están hechos los paisajes provinciales. Esta actividad en pocos años se convirtió en un punto de encuentro que anida lo mejor de los recursos naturales, los animales, la producción frutihortícola, las raíces y la familiaridad de quienes llevan adelante la actividad. Quizás sea momento de desviar los viajes en ruta y adentrarnos en la profundidad de una Argentina que tiene mucho para ofrecer.