Connect with us

Política Sectorial

La formalización, una herramienta clave para afrontar eventos climáticos

Published

on

Foto: La Voz del Interior

|Córdoba|

El pasado viernes 23 de abril un fuerte granizo cayó sobre la zona productiva de Pilar y Río Segundo, afectando a las quintas de horticultores ubicados en lo que se conoce como el cinturón verde ampliado de Córdoba capital. 

Unas 17 familias productoras sufrieron pérdidas parciales o totales en su predio, con rotura de cultivos pero también de infraestructuras de cobertura. Para solicitar ayuda estatal, dichas familias se inscribieron en el Registro Nacional de Agricultura Familiar (RENAF) del cual todavía no formaban parte.

Leer también: Horticultura en Pilar: todo por hacer

De esta manera, el informe de daños elaborado por investigadores de CONICET e INTA, en colaboración con los productores y productoras damnificados, permitirá solicitar fondos de emergencia para el sector ante el desastre ocasionado por el evento meteorológico extremo.

Cabe recordar que el RENAF es una herramienta creada para visibilizar y fortalecer el trabajo de los agricultores familiares en todo el país. A partir de la información que cada productor aporta al registrarse, es posible conocer cuántos y quiénes son, dónde viven y trabajan, qué producen y cuáles son sus potencialidades y necesidades específicas.  

Además, permite a los productores tener representatividad y organización para solicitar políticas públicas sobre tierras, acceso al agua, apoyo a la producción y a la comercialización, infraestructura, entre otras cosas.

Formalizar y visibilizar

El cinturón verde de Pilar y Río Segundo está en pleno proceso de construcción. Como bien señalaba semanas atrás Beatriz Giobellina, de INTA, a este medio, está conformado por productores que han migrado internamente desde el periurbano de Córdoba capital, expulsados por el avance inmobiliario o la dificultad para acceder a las tierras productivas de forma permanente.

Para la especialista, mientras que aquel cinturón "tenía sus sistemas de riego, su paisaje, su distribución de quintas, caminos y equipamientos", en esta nueva zona "está todo por hacer".

"Aquí los productores están sujetos al mercado de arrendamiento, que no es para nada benévolo con ellos. No tienen infraestructura, no tienen sistemas de riego, tampoco asesoramiento. Los mismos municipios están sorprendidos por esta actividad”, expresó la especialista.

Sin dudas, la formalización e inscripción de los productores en el RENAF es clave para atender problemas de coyuntura, pero también para exigir mejoras en las condiciones que actualmente se producen alimentos frescos en los periurbanos.

“Los cinturones verdes son muy importantes pero están abandonados. Los productores sobreviven como pueden (...). Si la sociedad reconoce que necesita que estos productores sigan alimentando al país, tiene que preocuparse por lo que sucede con ellos”, consideró Giobellina.

Advertisement

Lo más leído