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Comercialización

Mar Del Plata: descartan tomates por exceso de oferta y escaso consumo

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|Mar del Plata|

Lo sucedido con el tomate en Mar del Plata es la contracara de los altos precios que alcanzó la lechuga días atrás en otros puntos del país: a pesar de su bajo costo, en la ciudad costera se descartaron grandes cantidades de mercadería por el fenómeno de la ‘sobreoferta’ y una escasa demanda en el consumo.

La llegada de mercadería de otras zonas de producción como Corrientes, La Plata y Mendoza, dificultó la venta en el Mercado Central de Procosud S.A, lo cual se tradujo en el descarte de una gran cantidad de kilos de tomate que fueron a parar a la basura. “Se juntó toda la producción y no la pudo absorber el mercado”, señaló Guido Cecive, miembro del directorio del Procosud.

Además de desperdiciarse mucha mercadería, el exceso de oferta dañó fuertemente al productor local. “El tomate local no valía lo que tenía que valer, el mercado estaba saturado y los productores no llegaban a cubrir los costos”, dijo a Revista InterNos.

El dirigente explicó que los valores que se estaban pagando por cajón no llegaban a cubrir los costos de empaque, traslado, carga y descarga de mercadería. “Mucho se tiró en las quintas. Porque cosechar el tomate, embalarlo, trasladarlo y las comisiones en el mercado eran mucho costo. Directamente no les convenía llevarlo”. Por estos días la situación no ha variado significativamente.

Para Cecive esta crisis también se produce por el escaso consumo de frutas y hortalizas en la sociedad marplatense: entiende que los hábitos han cambiado mucho en los últimos años. “Antes se veía a la fruta y a la verdura como un artículo de primera necesidad que tenía que estar sí o sí en la mesa de todos los días. Lamentablemente fue cambiando esa perspectiva y pasó a ser un artículo de lujo”, dijo al diario La Capital.

Esto se traduce en la falta de rentabilidad del sector productivo: se pierde empleo y la posibilidad de generar ingresos para reinvertir en maquinaria y comprar insumos, entre otras cosas. En la comercialización el efecto también es directo, ya que a menores niveles de venta, menor cantidad de empleados en la actividad.

Para paliar las pérdidas, desde Procosud aclararon que se encuentran trabajando con la ONG Manos Solidarias para la donación de la mercadería que no pudo venderse, a fin de ser procesada y evitar su desperdicio. “Se llama a gente para que venga a colaborar con estas tareas pero no se da abasto con la cantidad de mercadería e inevitablemente se termina tirando”, concluyó Cecive.

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