Bananeros solicitan a Gildo Insfrán asistencia luego de sequías y heladas

|Argentina|

El sector bananero de Formosa, a través de su representación la filial Laguna Naineck de la Federación Agraria Argentina (FAA), solicitó al gobernador Gildo Insfran que decrete la Declaración de Emergencia Agrícola para la producción local. También solicitó asistencia económica a fin de “mitigar la difícil situación que atraviesa el sector en virtud de los daños ocasionados por las sequías y las actuales heladas registradas”, según se afirma en un documento publicado por la entidad.

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El reclamo se realizó mediante una nota firmada por el productor y director de la filial, Pánfilo Ayala, quien desde hace algunos años encabeza los reclamos de los pequeños y medianos productores de la región. En el texto, los federados señalan que las bajas temperaturas caídas durante los meses de junio y julio de este año afectaron a la producción -y la capacidad de producción- en aproximadamente un 70 por ciento, según estimaciones propias.

“Las intensas heladas cayeron en plena producción y quemaron frutas que se encontraban en pleno desarrollo para una futura recolección y la totalidad de la estructura foliar que iban a garantizar el llenado de la fruta para alcanzar el calibre adecuado para su comercialización”, añadieron.

La filial pidió al gobernador que analice aplicar un “fondo no retornable” para paliar el impacto climático sobre los productores afectados. “Este año hubo 150 hectáreas que sufrieron las tormentas registradas, que afectaron a unos 20 productores que han perdido totalmente su producción”, dijo Pánfilo Ayala.

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Y añadió que el productor “ya venía sufriendo la caída en el rinde en un 50%, por los daños causados debido a la sequía en 2020”. “El productor se va se va desanimando y desesperando, porque estamos en un momento de mucha zozobra e incertidumbre y el quebranto es permanente en las 640 familias productoras de bananas que existen en Formosa”, afirmó el director de FAA.

A la mencionada situación, Ayala añadió que los costos dolarizados dificultan que los productores puedan realizar sobre las plantaciones los trabajos culturales necesarios para obtener fruta de buen calibre y calidad. “No va a haber fruta de calidad en los próximos treinta días, la poca fruta que va a quedar se destinará seguramente a una comercialización interna quizás en provincias como Chaco y Corrientes, o Formosa capital”, expresó.

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