Incendios de yerbales en Corrientes: "Será barajar y dar de nuevo"

|Corrientes|

Aunque no sea tapa de diarios, aunque los portales digitales no reproduzcan la noticia a viva voz, Corrientes se incendia. El fuego persiste desde hace varias semanas y la situación es crítica porque se suma a una sequía prolongada que las lluvias aisladas de este 2022 no logran atenuar.

Según detalla el medio Agencia Tierra Viva, el siete por ciento de la superficie provincial, más de medio millón de hectáreas, fue arrasada por el fuego (principalmente en el centro-norte provincial). Ardieron pastizales, bosques, palmares, humedales bajo estrés hídrico, incluso plantaciones forestales e infraestructura rural.

Foto: Agencia Tierra Viva

La producción yerbatera es una de las actividades afectadas. Un informe realizado por Coninagro reportó que en Corrientes, por la seca de yerbales -y hablando solamente de las plantas-, el sector ya perdió 472 millones de pesos. Se calcula que fueron afectadas plantas de 0 a 10 años de edad en unas 1200 hectáreas, de un costo de 400 pesos mil cada una.

“Nunca se vivió una situación así en Corrientes, con tanta sequía y tan altas temperaturas. Se habla de que en la década de 1940 una seca similar, pero muchos señalan que no fue tan grande como ésta”, dijo al medio nacional TN Héctor Biale, presidente de APNEA.

La totalidad de la yerba que se produce en Argentina se cosecha en las provincias de Misiones y Corrientes, un 70% y un 30% respectivamente. Actualmente los incendios críticos se suceden del lado correntino, pero también los hubo en territorio misionero semanas atrás (tal como lo contaba Cristian Klingbeil, dirigente yerbatero, en esta nota con InterNos). En ambos casos, la falta de agua complica el panorama e impacta directamente en las plantaciones, que pierden volumen y calidad.

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“La seca está haciendo desastres en la producción. Lo que no se lleva el fuego, se lleva la seca. La parte más afectada es la zona sur de Misiones y norte de Corrientes. Hay localidades correntinas muy comprometidas como Colonia Garabi, Garrucho, Virasoro y San Carlos”, dijo a este medio Nelson Dalcolmo, director titular por la producción en el Directorio del Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM).

“Si tenemos que hablar de porcentajes, calculamos un 60% de pérdidas. De cualquier manera, de los cálculos que hicimos hace 20 días a hoy, las pérdidas crecieron muchísimo. Las evaluaciones las vamos a poder hacer cuando vengan las lluvias y empiece a brotar lo que quedó vivo. Será barajar y dar de nuevo”, agregó.

Foto: Agencia Tierra Viva

Para Dalcolmo, la situación tendrá un “efecto inmediato” sobre la oferta de yerba hacia los molinos. También condicionará los volúmenes de cosecha del próximo año y a mediano plazo, ya que será necesaria “una reposición de plantas debido a la gran mortandad” y dichas plantaciones no entrarán en producción sino hasta cuatro años después.

Orlando Stvass, tesorero de Coninagro y representante de una cooperativa que elabora yerba mate en esa provincia, aseguró que el próximo año podría haber un importante faltante de mercadería. “Ya hemos perdido un 60% de la producción para el 2023. Se viene una situación difícil”, alertó a TN.

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Como viene sucediendo en estos casos, organizaciones de productores, municipios afectados y autoridades de provincia trabajan dentro de una Mesa de Emergencia para reconocer daños y moderar el impacto.

“No es la primera Emergencia y seguramente esta no va a ser la última. Primero haremos un relevamiento de daños, para que luego los productores obtengan un certificado de Emergencia y con eso accedan a los beneficios impositivos, créditos blandos, subsidios”, concluyó Dalcolmo.

Fuentes:

• TN
• Agencia Tierra Viva